Cuando una persona toma la decisión de hacer testamento debe tener en cuenta una serie de disposiciones que están establecidas en el Código Civil español. Al existir también un Código foral (para Cataluña, Aragón, Galicia y parte del país Vasco) éstas varían dependiendo del lugar en dónde se viva.
Por esa razón se aconseja que si bien el testamento olográfico (hecho de puño y letra) es válido, lo recomendable es pedir el consejo profesional de expertos en temas testamentarios para que le indiquen al testador cual es el marco legal adecuado para emitir el documento.
De los dos tipos de herederos que hay, unos son los forzosos que son los que la ley ampara y obliga al testador a tener en cuenta y que son los hijos y nietos, los padres y los cónyuges, en este orden preciso).
A éstos no se los puede ignorar al hacer testamento, salvo que hayan incurrido en alguno de los incisos que la ley determina para desheredar: amenaza, agresión, malos tratos, presión, etc. ejercidas por el/los heredero/s sobre el testador.
A estos les corresponde un tercio de los bienes y según la voluntad de quien otorgue el documento, el llamado tercio de mejora puede ser repartido entre todos o ir a engrosar la cuota parte de uno o varios de ellos.
Los herederos voluntarios son generados al hacer testamento y pueden ser personas o instituciones a quienes ante la existencia de herederos forzosos, solo puede dejársele el llamado: tercio de libre disposición.
En caso de no existir herederos forzosos, el otorgante podrá nombrar tantos herederos naturales como le apetezca y dividir su patrimonio entre ellos de la manera que crea mas conveniente.
Visite la web de Testamenta e infórmese antes de hacer testamento, cosa que también podrá hacer online y a un costo accesible.
Foto gentileza de: 3.bp.
