Mi hermano y yo somos mellizos y hace tan solo unos meses nos hemos enterado que los que creíamos nuestros padres, en realidad nos habían adoptado. Estamos en edad de ser abuelos por lo que la noticia no nos cambió la vida.
Lo que sí nos la ha cambiado es que esa noticia la recibimos de un notario que vino a visitarnos al pueblo y nos contó que nuestra verdadera madre era una señora que por “circunstancias de la vida” tuvo que entregarnos pero que jamás nos olvidó.
Resulta que la señora, a quien conocimos como Doña Blanca y que, aparentemente era amiga de nuestros padres, solía visitarnos a menudo y siempre llegaba cargada de regalos: dulces, zapatos y ropa para nosotros dos.
Nunca supimos la naturaleza de la relación y cuando éramos unos niños de apenas 10 o 12 años, dejamos de verla porque se mudó al extranjero. Ahora nos hemos enterado que se casó con un diplomático y viajó por el mundo entero.
No tuvo hijos y al hacer testamento nos dejó a nosotros dos todo lo que tenía: acciones de empresas inglesas e inmuebles en Londres, parís, Madrid y Roma. Así que hoy nos disponemos a viajar nosotros también, primero a vender nuestro patrimonio y luego por placer.
Antes de embarcarnos, ambos hemos decidido realizar testamento online y lo hicimos en la web de Testamenta, donde nos han prestado un servicio de primera. Ahora sí que podemos embarcarnos tranquilos.
Foto gentileza de: 100ideasparaemprender
